miércoles, 29 de octubre de 2008

MAYÚSCULAS


Navegando por la red se encuentran verdaderas barbaridades relacionadas con personas con trastornos alimenticios.
Estoy a favor de la libertad de expresión, por ello espero que se respete que:
"Me declaro totalmente en contra de aquellos que utilizan diminutivos para designar estos grandes problemas."
Teniendo un denominador común, comida y aspecto físico, existen muchas patologías, algunas muy conocidas y otras en estudio.
Se incendian mis ojos al leer sobre “ANAS” “MIAS” “WANNABE”…

SON ENFERMEDADES CON NOMBRE PROPIO:


· OBESIDAD
Es el trastorno alimenticio más frecuente, se caracteriza por un exceso de grasa que se traduce en aumento del peso, sobrepasando un 15% del peso ideal.

· ORTOREXIA
Se define como la obsesión por comer comida saludable. Quiénes la padecen tienen obsesión por la ingesta de productos probióticos, alimentos orgánicos, cultivados ecológicamente sin sustancias artificiales, entre otros. También presentan obsesión por la preparación de la comida y los recipientes utilizados para cocinar los alimentos.

· VIGOREXIA
La vigorexia se caracteriza por la obsesión de querer tener un cuerpo perfecto. Quiénes la padecen asocian la belleza con el aumento de la musculatura y con una gran tonicidad, por lo que el ejercicio se vuelve una adicción para ellos. Los vigoréxicos utilizan anabólicos y suplementos alimenticios que no están aprobados y que pueden poner en riesgo la salud.

· SÍNDROME DEL COMEDOR SELECTIVO
Se define como comedor selectivo a las personas que se nutren exclusivamente de menos de 10 alimentos, durante un mínimo de 10 años y generalmente está asociado a otros trastornos alimentarios. Suelen aparecer con mayor frecuencia en la niñez muchas veces como consecuencia de carencias afectivas, traumas o problemas psicológicos.

· SÍNDROME DEL COMEDOR NOCTURNO
El comedor nocturno se levanta a comer por la noche, aunque continúa dormido, asalta la nevera para comer compulsivamente y como no está consciente de lo que hace, no recuerda nada al despertar. Este trastorno alimenticio se asocia con el comedor por atracones, con la bulimia y la obesidad. Quiénes lo padecen, suelen hacer dieta durante el día.

· ANOREXIA NERVIOSA
La anorexia nerviosa o simplemente anorexia es un trastorno alimenticio con mayor incidencia en la mujeres. Se caracteriza porque la persona se priva de comer intencionalmente provocando con ello una pérdida extrema de peso. Estas personas suelen realizar estrictas rutinas de actividad física para no ganar peso.

· PREGNOREXIA
Se denomina pregnorexia a la anorexia en mujeres embarazadas, que con el afán de bajar de peso, ponen en riesgo no sólo su propia vida, sino la vida de su futuro hijo.

· BULIMIA NERVIOSA
La bulimia es un trastorno alimenticio caracterizado por la ingesta de grandes cantidades de alimentos (también llamados atracones), tras los cuales las personas utilizan métodos no apropiados, denominados purgas, para deshacerse de los alimentos ingeridos, tales como auto provocarse el vómito, utilizar laxantes, enemas, o medicamentos diuréticos, o bien realizar ayunos o ejercicio excesivo para controlar el peso.

· ATRACÓN COMPULSIVO
Este trastorno alimenticio conocido como Binge Eating Disorder, por su nombre en inglés, es más frecuente en mujeres. Consiste en episodios de comilonas o atracones descontrolados en breves períodos de tiempo (por lo general 2 horas), hasta que las personas se sienten negativamente llenas. A diferencia de la bulimia, quienes lo padecen no utilizan purgas para eliminar el exceso de comida y tras los atracones experimentan sentimientos de culpa y desánimo.

· SÍNDROME DE
PICA
El síndrome de pica o simplemente pica es una extraña enfermedad alimenticia que provoca el deseo urgente de ingerir sustancias no destinadas al consumo humano, tales como yeso, detergente, pelo, hielo, jabón, entre muchas otras. Según el tipo de sustancia ingerida, el síndrome de pica toma nombres específicos, por ejemplo: Geofagia (comer tierra), Pagofagia (comer hielo), Tricofagia (comer pelo).
(Son tan solo definiciones encontradas en algún recoveco de internet, No es un estilo de vida) ... y punto.

lunes, 20 de octubre de 2008

Claridad...




El sol de la mañana atravesó el parque,
las calles, el balcón, nuestra ventana.
Se escurrió entre cristales, y acarició tu rostro.
Lo iluminó tenue y cálido.


Me quedé quieta observando el desorden de tus rizos.
El espléndido ébano de tu cabello en la almohada, la luz del amanecer.


Y te acaricié en silencio, cuidándome de no romper tu sueño.
Y observé tus hombros desnudos,
fuertes y sensuales elevándose con cada respiración.

Modifiqué el ritmo de mi aliento, al unísono con el tuyo.
Tus pestañas inmensas parpadeando un océano calmado,
y mis suspiros al pensar en espiarte dormido.
Tu boca, tus deliciosos labios, la ternura de sus besos,
me estremecía al mirar su perfección y dulzura.

La quietud y magia en tu torso desnudo,
mientras yo suplicaba al reloj una tregua.
… y en una de mis caricias, tu nariz se empezó a arrugar graciosa.
Mientras, tus mejillas dibujaban sonrisas, en tu cara y la mía.
Estabas naciendo al día,
Somnoliento me buscaste,
abriste los ojos y las manos.

Encontré refugio en tu pecho y en nuestro mundo sin segundos
En la calle seguía amaneciendo,
pero…
… en tu abrazo no existe el tiempo.

jueves, 9 de octubre de 2008

La Solución


La cocina se hizo fría de repente, comenzó a nevar sobre la mesa, las sillas y la encimera… sintió un golpe súbito y certero, de un arma blanca que le atravesó desde la espalda hasta el pecho.

Colgó el teléfono con la sensación de qué nunca lo tendría que haber descolgado. Comenzó a caminar, sin rumbo, y sus pasos sonaban arrastrándose por el terrazo, y su alma se derrumbaba con cada huella. La miel de su mirada se hizo tierra, oscurecida por la ira y con la humedad propia del sentimiento de odio y de despecho. El arrebato del desaliento.

Cesó la nieve de la cocina, y en el salón sólo algunos copos de tristeza. La conversación arañaba sus oídos y recuerdos. Y se repetía a cámara lenta, acentuando el miedo. Las sienes le palpitaban frenéticas, tremendas. Las lágrimas acuchillaban sus mejillas, pálidas y marchitas tras la noticia.

- A Papá le tienen que operar…
- Pero… ¿Es seguro? ¿No decían que se podía esperar?
- Su corazón es muy grande, pero no tiene fuerzas, Es necesario y ya sabes que hay riesgo. Va a ser una operación complicada, de esas de muchas horas.
- Lo sé, le van a tener que sacar el corazón, enfriarlo, y enchufar su cuerpo a una máquina que le mantenga vivo mientras…
- … mientras lo curen? Pero puede que…
- Hay posibilidades de…
- … si pero no hay más salidas. Y saldrá todo bien ¿Verdad? Tengo miedo.
- Yo también, te quiero tata.
- Y yo mi niña.

Deambuló por la casa sin rumbo, con las piernas cansadas y la mirada perdida. Estaba espiando el recuerdo de su héroe, la risilla de sus muñecos, su profesor de pintura…
Oía la voz de su Padre durmiéndola en la cuna y el pasodoble que tocó el día de su boda. Recordaba cuando la cogía en el pasillo de su casa y bailaban hasta marearse… y tenía miedo. Se quedaba paralizada al pensar en ese porcentaje tan duro y pequeño que podía robarle a su caballero de mirada azul. Esa cifra de la que nadie habla, y que tanto daño hace.

Su pequeño revoloteaba hacia ella, y se limpió la humedad e intentó encontrar la máscara de Mamá feliz. Pero su hijo de apenas cuatro años, le preguntó qué le ocurría.

- Abuelito tiene pupa en el corazón.- le dijo con la voz más firme que le permitió su alma.
- Bueno, no te preocupes.- dijo el pequeño con una sonrisa.- Le doy un besito y se le cura.

Media sonrisa se dibujó en la cara de la Mamá.:
- No cariño, esta pupa no se cura con un besito.

Durante gran parte de la tarde, tata se dedicó a realizar sus tareas, intentando no pensar. Comenzó mil faenas, pero en todas estaba su Padre.
El pequeño desde su conversación había desaparecido. Y le escuchaba desarreglar la habitación, el baño, el cuarto de los juegos…

… pasado un tiempo de ruidos y desórdenes el niño corrió en busca de su madre. Con los ojos brillantes y una sonrisa de victoria:

- Ya está mamá, no tienes que estar más triste
- ..¿Y eso mi vida?
- Encontré lo que necesitábamos para curar a Abuelito:

La mirada de tata se inundó de sentimiento.
- Esta tirita, es el antídoto para el corazón de Abuelito

No hay nada más puro que el mundo de los niños.
La ternura del pequeño derrotó las cifras, la nieve y las cuchillas, y Tata encontró la paz en el gran corazón de su Hijo.





Con toda mi alma a Motota y nuestro pequeño tesoro

sábado, 4 de octubre de 2008

Bebe "ELLA"




No recuerdo la fecha exacta, pero tengo en mi cabeza aquel día tan grabado...
Lau me vino a buscar en uno de esos días en lo que tan solo quería esconderme, me soltó candidad de improperios, su mirada de "ya está bien de que no espabiles" y me dio una patada donde la espalda pierde su santo nombre para llamarse culo.

Y me hizo entrar en el coche, puso un CD, me miró: Escucha.

La canción se hizo con mis ojos súbitamente. Y sobrevoló por todos los malos momentos, y los hizo desaparecer como por prescripción de un mago invisible. Se escurrieron las penas

Era lo que necesitaba escuchar, ella siempre ha sabido lo que necesito. Las palabras justas, los gestos necesarios... y así descubrí una de las canciones que me hacen recordar, que debo disfrutar de esta vida tan linda.

Lau, tengo tu nombre tatuado en mis manos, pero no he olvidado, que te debo una luna. MZ